El domingo pasado junto a Mafe y 6.000 personas mas, trotamos los 10 K de la “Carrera AVON contra el cáncer de mama”. La lluvia fue incesante y a la final terminamos empapados de pies a cabeza, pero fue tremenda experiencia!!
Al finalizar la carrera, en la tarima tuvieron la palabra mujeres que habían luchado contra el cáncer de mama y lo habían vencido, testimonios de fuerza y ganas de vivir.
Me sorprendió escuchar que muchas de estas mujeres coincidieron en la importancia de una sana alimentación; y afirmaron que sin duda somos lo que comemos, y que por esta razón el equilibrio es nuestra mejor opción.
Creo en esta afirmación el 100%, entendiendo que muchos de los grandes males y enfermedades que aquejan a las sociedades de hoy en día, se deben a problemas en la alimentación.
Entender como la alimentación afecta nuestro cuerpo, las causas de nuestros hábitos alimenticios y las consecuencias de todo esto, debe ser algo que todos y cada uno de nosotros debamos preguntarnos.
Hacer cambios ahora para el futuro no es tarde, decidir llevar una vida mas “sana” es algo que no debe esperar, constancia y coraje… ¿Qué más hace falta para poder cambiar?
Al finalizar la carrera, en la tarima tuvieron la palabra mujeres que habían luchado contra el cáncer de mama y lo habían vencido, testimonios de fuerza y ganas de vivir.
Me sorprendió escuchar que muchas de estas mujeres coincidieron en la importancia de una sana alimentación; y afirmaron que sin duda somos lo que comemos, y que por esta razón el equilibrio es nuestra mejor opción.
Creo en esta afirmación el 100%, entendiendo que muchos de los grandes males y enfermedades que aquejan a las sociedades de hoy en día, se deben a problemas en la alimentación.
Entender como la alimentación afecta nuestro cuerpo, las causas de nuestros hábitos alimenticios y las consecuencias de todo esto, debe ser algo que todos y cada uno de nosotros debamos preguntarnos.
Hacer cambios ahora para el futuro no es tarde, decidir llevar una vida mas “sana” es algo que no debe esperar, constancia y coraje… ¿Qué más hace falta para poder cambiar?
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